sábado, 25 de agosto de 2012

JUNTO AL SENA




JUNTO AL SENA
Por Luis Enrique Cruz Villada.

Bailar contigo junto al Sena, sentarme junto a ti en una habitación con vista a la torre Eiffel.
Tres acordes en el piano, unos cuantos más en la guitarra, juegos de palabras y mis labios perdiéndose en los tuyos.
Tenerte entre mis brazos bajo la lluvia y sentirme el hombre más rico del mundo.
Sentir tu esencia  entre las páginas de mis libros, tu sabor tan firme  como el cuerpo de mi café cada mañana.
Llorar con lágrimas de cielo por poder acariciarte y tener tus manos abrazándome, como pidiendo que no me marchase nunca.
Escuchar una canción, repetirla mil veces en el piano, tanto como desearía hablarte y decirte que te amo.
Tomarte de la mano y caminar por la orilla del mar, sentirme con la fuerza de un huracán, la fragilidad de una gota de agua, teniéndote a mi lado.
Creyendo en los deseos y en los milagros, pedirte por siempre a mi lado al soplar las velas de mi pastel de cumpleaños.
Tú aroma en mi chamarra, en mi almohada, tu voz resonando en las paredes, tu mirada clavada en cada rincón.
Recostada en el piano viéndome tocar, en mi pecho mientras te leo una historia, un típico cuento de hadas.
Un almuerzo de tostadas quemadas, destrozar juntos la cocina, terminar riendo en el piso de la sala, un beso, heme aquí, ¡soy tuyo!