RECUERDOS
Por Luis Enrique Cruz Villada
ENTRE A LA BIBLIOTECA Y DEJE LAS LUCES APAGADAS A PESAR DE CASI ESTAR COMPLETAMENTE A OSCURAS, ME SENTÉ EN EL SILLÓN ROJO Y EMPECE A REFLEXIONAR SOBRE LOS ÚLTIMOS AÑOS.
LAS PERSONAS QUE HE CONOCIDO, LOS LUGARES QUE HE VISITADO Y SOBRE TODO AQUELLO QUE HE APRENDIDO.
ENCENDÍ UN CIGARRO Y SEGUÍ REFLEXIONANDO MIENTRAS VEÍA COMO EL HUMO SE DESVANECÍA, IMPREGNANDO CADA RINCÓN DE LA HABITACIÓN CON SU AROMA.
MI ÁNGEL DE MANITAS FRÍAS APARECIÓ ENTRE MIS MEMORIAS, SU PIEL BLANCA Y SUS SUAVES MANOS, SUS SUAVES Y EFÍMEROS BESOS.
MIS TARDES DE LLUVIA Y DE LLANTO, MI ADICCIÓN AL CAFÉ, MIS GANAS DE IR A GRITARLE: ¡TE EXTRAÑO!. MIS MESES DE SANACIÓN ESPIRITUAL.
MIS TARDES OYENDO AL MAGO, A OCERANSKY, UNA COPA DE VINO TINTO...
Y TRATANDO DE APARENTAR QUE NO PASO NADA, SEGUIR ADELANTE, REÍR CON UNA PELÍCULA DE JIM CARREY, RETOMAR LOS FLIRTEOS CASUALES, UNA MIRADA, UNA SONRISA, UN -DISCULPA,¿QUÉ HORA ES?.
LAS ILUSIONES Y LOS DESEOS, LAS GANAS DE VOLVER A BESAR, EL SENTIRME VIVO CON EL AROMA DEL CAFÉ, CON EL ARDOR DEL TEQUILA EN LA GARGANTA.
QUIZA SEA HORA DE SALIR A CAMINAR...
No hay comentarios:
Publicar un comentario